23 de mayo de 2007

¿Me lavo o me la tomo?
Bueno, sacudida ya la neblina, retomo el compartir en este espacio pequeño algunas de las experiencias, vivencias, fumadas, ideas, en fin, todo lo que se va acumulando en este ir y venir. Recién me estaba acordando de algunos de los viajes que hemos hecho con los colegas del equipo, no puedo evitar compartir algunas de ellas que me parecen simpáticas porque resumen las distancias de formas muy curiosas. Siempre salir a campo es un desafío, no solo porque tenemos la ansiedad de a dónde nos van a llevar los caminos, habrá calor? habrá frío?, será muy lejos?. Luego la otra parte, me voy a poder entender con la gente que está allí? Una barrera enorme es el idioma, pero no insalvable, he de decir. Los humanos tenemos una capacidad fascinante para la comunicación. Pues fuimos a las montañas del área Ixil, en Chajul que es un territorio hermoso pero también difícil. Primero llegamos a un punto en el que había un caminito por donde pasó el carro hasta donde ya no pasó, y bueno, a descargar todo y a caminar se ha dicho! Entonces empezó la caminada, para abajo, abajo, abajo, abajo, como dos horas y media, uff! cansadisimo, luego por supuesto, para arriba, arriba, arriba. Y en medio de nada, de campos y campos de verde, empezaron a aparecer cercos y ranchos. Qué alivio! una aldea (Chaxá) y un montón de niños! Después de haber estado en la exhumación pues el regreso lo empredimos con una parte del grupo en otra dirección (otra historia) y Rony se regresó por el mismo camino. Al llegar pasó la historia del agua. Resulta que llegan aquellos, todos cansados y claro, la gente de la comunidad les ofrece de comer. Hay cansancio pero también hay hambre. Entonces se aprestan a comer y les pasan un vasito con agua. Obvio, la lógica es tomarse un poco para refrescarse... y discretamente se acerca alguien a decirle, don, es para lavarse, no para tomársela. Hijos! bueno, ni modo... ya me la tomé. Entonces luego de los tamalitos y reponer energías, va de nuevo el vasito con agua... entonces se lava... y viene de nuevo el don (seguramente con algo de risa de ver a estos peludos tan extraños)... don, es para tomársela, no para lavarse!

20 de mayo de 2007

De nuevo el silencio se apodera de mi. Hace algunos meses que me da por cuestionar el sentido de cada cosa que hago, para que? me pregunto a diario. Talvez este autoimpuesto silencio es un mecanismo de defensa porque me tiene abrazada la tristeza y no me quiere soltar. No, no hay nada que marche mal. La verdad es que ni siquiera he tenido mucho trabajo en la oficina. En casa, las cosas van (aunque debo admitir que de vez en cuando me siento la domesticada total). Seguramente tiene que ver con el dejar de hacer cosas que me gustan, que he dejado de hacer porque no encuentro las ganas de hacerlas. En fin, esto del blog es algo asi como un diario, nada mas que publico. Esta bien, porque me sirve para no darme paja y a la vez apelar al buen sentido de quienes lo leen para que hagan una de varias cosas 1) me ignoren, 2) me escriban un email con florecitas y frases churras, 3) me escriban un email dandome una buena maltratada para que salga ya de este sopor y me decida de una vez a sacarle el jugo a cada dia.
Asi que agradecere cualquier aporte, sea uno de esos tres u otro.
saludos y salud